The Noble Qur'an Encyclopedia
Towards providing reliable exegeses and translations of the meanings of the Noble Qur'an in the world languagesJoseph [Yusuf] - Spanish Translation - Noor International Center
Surah Joseph [Yusuf] Ayah 111 Location Maccah Number 12
1. Alif. Lam. Ra[387]. Estas son las aleyas de un libro esclarecedor.
2. Hemos revelado el Corán en lengua árabe para que podáis comprenderlo.
3. Vamos a contarte (¡oh, Muhammad!) la historia más hermosa de las que te revelamos en el Corán y que antes desconocías.
4. Recuerda cuando José dijo a su padre: «¡Padre mío!, he visto en un sueño que once astros, el sol y la luna se postraban ante mí».
5. (Su padre) dijo: «¡Hijo mío! No cuentes tu sueño a tus hermanos, pues podrían conspirar contra ti. En verdad, el Demonio es un enemigo declarado del hombre.
6. »Así es como tu Señor te ha escogido y te enseñará la interpretación de los sueños, y completará Su gracia sobre ti (haciendo de ti un profeta) y sobre la familia deJacob, como ya hiciera con tus antepasados Abraham e Isaac. Ciertamente, tu Señor es Sabio y Omnisciente».
7. En José y sus hermanos hay, en verdad, una lección y pruebas sobre el poder y la sabiduría de Al-lah para quienes preguntan (acerca de su historia).
8. Recuerda cuando (los hermanos de José) se dijeron entre sí: «Nuestro padre ama a José y a su hermano (pequeño de madre, Benjamín,) más que a nosotros, mientras que nosotros somos un grupo fuerte y numeroso. Ciertamente, nuestro padre está en un claro error.
9. »Matemos a José o expulsémoslo lejos para que nuestro padre se fije solo en nosotros, y arrepintámonos después para ser rectos y virtuosos».
10. Uno de ellos dijo: «No matéis a José. Arrojadlo a un pozo donde pueda encontrarlo alguna caravana (que se lo lleve lejos como esclavo), si estáis decididos a hacerlo».
11. (Entonces se dirigieron a su padre y le) dijeron: «¡Oh, padre!, ¿por qué no nos confías a José si nosotros nos preocupamos por él y queremos su bien?
12. »Envíalo con nosotros mañana para que se divierta y juegue, y nosotros lo protegeremos».
13. (Su padre) dijo: «Si os lo lleváis, me entristeceré, y temo que lo devore el lobo en un descuido vuestro».
14. (Estos) respondieron: «Si se lo comiera el lobo siendo como somos un grupo fuerte, seríamos unos inútiles».
15. Y cuando se llevaron a José habiendo acordado arrojarlo al fondo de un pozo, le revelamos: «Un día les recordarás lo que hicieron y no te reconocerán».
16. Y se presentaron ante su padre por la noche, llorando.
17. Dijeron: «¡Oh, padre!, nos pusimos a hacer carreras y dejamos a José con nuestras pertenencias, y un lobo se lo comió; y no vas a creernos a pesar de que decimos la verdad».
18. Y le mostraron la camisa de José manchada de una sangre falsa. (El padre) dijo: «¡No, (no es cierto lo que decís)!, algo malo habéis tramado contra él[388]. Seré paciente. Al-lah es mi único consuelo ante lo que contáis (pues solo a Él puedo pedirle ayuda)».
19. Y llegó una caravana (de viajeros) y mandaron a unos a por agua. Cuando echaron el cubo en el pozo, uno de ellos dijo: «¡Buenas noticias! ¡Aquí hay un niño!». Y ocultaron la verdad sobre José (al resto de la caravana) con la intención de venderlo como una mercancía[389]. Pero Al-lah sabía bien lo que hacían.
20. Y lo vendieron por un bajo precio, por unas pocas piezas de plata[390], pues consideraban a José insignificante.
21. El egipcio que lo compró le dijo a su mujer: «¡Haz que su estancia (entre nosotros) sea confortable! Puede que nos sea de utilidad o que lo adoptemos como hijo». Así es como establecimos a José en la tierra de Egiptoy le enseñamos la interpretación de los sueños. Nadie puede evitar que se cumpla la voluntad de Al-lah, pero la mayoría de la gente no lo sabe.
22. Y cuando se hizo un hombre le concedimos sabiduría y conocimiento. Así es como recompensamos a quienes hacen el bien.
23. Y la señora de la casa intentó seducirlo y cerró las puertas. Entonces le dijo: «¡Ven a mí!». Él contestó (rechazándola): «¡Que Al-lah me proteja! Mi amo (tu marido) me ha tratado siempre bien (no voy a traicionarlo). En verdad, los injustos no triunfarán».
24. Y ella lo deseó, y él habría accedido de no haber visto una señal de su Señor. Y así alejamos de él el mal y la indecencia. Ciertamente, él era uno de Nuestros siervos a los que escogimos (para transmitir Nuestro mensaje) y era sincero (en su adoración a Al-lah).
25. Y ambos corrieron hacia la puerta y ella le desgarró la camisa por detrás, y se encontraron con su marido en el umbral.Ella dijo (maliciosamente para alejar de ella cualquier sospecha): «¿Qué merece quien ha pretendido una mala acción contra tu mujer sino la cárcel o un castigo doloroso?».
26. (José) dijo: «¡Ella fue quien intentó seducirme!». Un miembro de la familia de ella dijo: «Si la camisa está desgarrada por delante, ella dice la verdad y él miente;
27. »mas si la camisa estádesgarrada por detrás, ella miente y él dice la verdad».
28. Y cuando (su marido) vio que la camisa estaba desgarrada por detrás, dijo: «Esta es una maquinación de las que hacéis las mujeres. Ciertamente, vuestras maquinaciones son terribles.
29. »José, no menciones a nadie lo sucedido; y tú, (mujer) pide perdón por tus pecados, en verdad, has sido una pecadora».
30. Y algunas mujeres de la ciudad comentaban: «La mujer de Al Aziz[391] pretende seducir a su joven sirviente. Está loca de amor por él. Ciertamente, la vemos en un claro error».
31. Cuando ella supo lo que rumoreaban, les envió (unas invitaciones) y preparó un banquete, y entregó un cuchillo (bien afilado) a cada una de ellas (para que cortaran la comida). Entonces le dijo (a José): «Entra para que te vean». Cuando lo vieron, exaltaron (su belleza) y se cortaron las manos con los cuchillos (sin darse cuenta), y dijeron (maravilladas): «¡Válganos Al-lah! Este no es un ser humano, sino un ángel noble».
32. Entonces, ella dijo: «He aquí aquel por quien me criticabais.Y es cierto que quise seducirlo, pero él se resistió. Mas si no hace (ahora) lo que le ordeno, será encarcelado o humillado».
33. (José) invocó a Al-lah diciendo: «¡Señor!, prefiero la cárcel a lo que me piden; y si no apartas de mí lo que traman, cederé y seré de los ignorantes».
34. Y su Señor respondió a su súplica y alejó de él lo que maquinaban. En verdad, Él es el Oyente (de todas las cosas), el Omnisciente.
35. Después, a pesar de ver las pruebas (de su inocencia), consideraron conveniente encarcelarlo durante un tiempo (para evitar las habladurías).
36. Y entraron con él en la cárcel dos jóvenes. Uno de ellos le dijo (a José): «Me he visto (en sueños) prensando uva». Y el otro le dijo: «Yo he visto (en sueños) que llevaba pan sobre la cabeza y que los pájaros comían de él. Explícanos su interpretación, pues vemos que eres un hombre de bien».
37. (José) respondió: «Antes de que os traigan la comida que os proporcionan, os habré contado su interpretación, pues es parte de lo que mi Señor me ha enseñado. (Sabed que) mehe desentendido de la religión de quienes no creen en Al-lah y niegan la otra vida,
38. »y sigo la religión de mis antepasados Abraham, Isaac y Jacob. No podemos adorar a otros equiparándolos con Al-lah (sino que debemos adorarlo solo a Él). Esta es una gracia[392] de Al-lah para nosotros y para la humanidad, pero la mayoría de la gente es desagradecida.
39. »Compañeros de prisión, ¿qué es mejor, adorar a varias divinidades o adorar solo a Al-lah, el Único, el Dominador Supremo?
40. »Lo que adoráis fuera de Él no son sino nombres que vosotros mismos y vuestros antepasados habéis inventado (con los que nombráis a vuestros ídolos) sin la autorización de Al-lah. El poder de decretar pertenece solo a Al-lah, y ha ordenado que se Lo adore solo a Él. Esa es la religión recta y verdadera, pero la mayoría de la gente no lo sabe.
41. »¡Compañeros de prisión!, con respecto a vuestros sueños, uno de vosotros (saldrá libre) y servirá vino a su señor (volviendo a gozar de su gracia), y el otro será clavado en un madero y los pájaros comerán de su cabeza. Lo que me habéis preguntado está ya decidido».
42. Y (José) dijo a quien creía que se salvaría de los dos: «¡Háblale de mí a tu señor!». Mas el Demonio hizo que se olvidara, y (José) permaneció en la cárcel durante unos años.
43. Y dijo el rey[393] (de Egipto): «Veo en mis sueños que siete vacas gordas son devoradas por siete flacas, y veo también siete espigas verdes y siete secas. ¡Vosotros, mis dignatarios!, decidme qué significa, si podéis interpretar los sueños».
44. Estos respondieron: «Es una maraña de sueños, y nosotros no sabemos interpretarlos».
45. Y el que (había sido compañero de José en la cárcel y) se había salvado se acordó de él al cabo de un tiempo y dijo: «Yo os informaré sobre su significado. Permitid que vaya (a ver a José)».
46. (Cuando vio a José le dijo:) «José, tú que eres un hombre veraz, dime qué significan sietes vacas gordas devoradas por siete flacas, y siete espigas verdes y siete secas para que pueda regresar a mi gente y sepan (la respuesta)».
47. (José) respondió: «Cultivaréis la tierra durante siete años consecutivos, y lo que recolectéis lo dejaréis en su espiga, salvo una pequeña parte que consumiréis.
48. »Después vendrán siete años duros que consumirán lo que habíais almacenado para ellos, salvo una pequeña parte que habréis reservado (para sembrar).
49. »A continuación vendrá un año (de abundante lluvia) que socorrerá a la gente, y en él prensarán (para hacer aceite y vino)».
50. El rey dijo: «¡Traedlo (a José) ante mí!». Y cuando el emisario se presentó ante él, (José) le dijo: «Regresa a tu señor y pregúntale qué sucedió con las mujeres que se cortaron las manos. Ciertamente, mi Señor sabe bien lo que tramaban».
51. (El rey las hizo comparecer y) les preguntó: «¿Qué pasó cuando intentasteis seducir a José?». Estas contestaron: «¡Válganos Al-lah! No hizo nada malo que supiéramos». La mujer de Al Aziz dijo entonces: «Ahora la verdad saldrá a la luz (para todos). Yo fui quien intentó seducirlo, y él dice la verdad.
52. »Esto es para que se sepa que yo no lo traicioné a sus espaldas y que Al-lah no deja que triunfen los planes de los traidores[394].
53. »Y no pretendo exculparme (de toda culpa), pues el interior del hombre lo incita al mal; salvo a quien recibe la misericordia de mi Señor. Ciertamente, mi Señor es Indulgente y Misericordioso».
54. El rey dijo: «Traedme a José; lo destinaré a mi servicio». Y cuando habló con él, le dijo: «Desde hoy ocupas entre nosotros un puesto de confianza».
55. (José) dijo: «Ponedme a cargo de las despensas del país, pues sabré protegerlas con conocimiento».
56. Y así es como le concedimos a José poder en el país para establecerse donde quisiera. Concedemos Nuestra misericordia a quien queremos, y no dejamos a quienes hacen el bien sin recompensa.
57. Y la recompensa de la otra vida es mejor para quienes creen y temen a Al-lah.
58. Y llegaron los hermanos de José (para comprar provisiones) y se presentaron ante él sin reconocerlo, aunque él sí los reconoció.
59. Y cuando les hubo suministrado las provisiones que necesitaban, les dijo: «(La próxima vez que vengáis) traed con vosotros a vuestro hermano de padre (que decís que tenéis), pues veis que doy la medida cumplida de grano y que soy el mejor anfitrión.
60. »Mas si no lo traéis, no os abasteceré más y no os acercaréis a mí».
61. Estos dijeron: «Haremos lo posible para persuadir a su padre; eso haremos».
62. Y dijo José a sus criados: «Poned de nuevo sus mercancías en sus alforjas para que las reconozcan cuando lleguen a su familia y regresen[395]».
63. Y cuando regresaron junto a su padre, dijeron: «¡Padre!, no nos suministrarán más alimentos (si no vamos con nuestro hermano). Envíalo con nosotros para que nos aprovisionen, nosotros lo cuidaremos de verdad».
64. Dijo (el padre): «¿Cómo podría confiároslo después de que os confiara a su hermano con anterioridad (e hicisteis con él lo que hicisteis)?Al-lah es el mejor protector y el más Misericordioso».
65. Y cuando abrieron sus pertenencias encontraron que sus mercancías les habían sido devueltas. Dijeron: «¡Padre!, ¿qué más podemos desear?Estas son nuestras mercancías y nos han sido devueltas. Conseguiremos más provisiones para nuestra familia, protegeremos a nuestro hermano y obtendremos la carga de un camello más; será fácil obtenerla».
66. (El padre) dijo: «No lo enviaré con vosotros hasta que juréis solemnemente por Al-lah que regresaréis con él, a menos que puedan con todos vosotros». Y cuando hubieron jurado, les dijo: «Al-lah es testigo de cuanto hemos dicho».
67. Y dijo: «¡Hijos míos!, no entréis (en la ciudad) por una sola puerta, entrad por puertas distintas (por vuestro bien), (aunque) yo no puedo seros de ninguna utilidad ante lo que Al-lah haya dispuesto. El poder de decretar pertenece solo a Al-lah. A Él me encomiendo yo y quienes confían en Él».
68. Y entraron por donde su padre les había ordenado, aunque ello no les habría servido de nada ante el designio de Al-lah y respondía solo a una necesidad interior que Jacob satisfizo (de proteger a sus hijos del mal de ojo).Ciertamente, poseía un gran conocimiento (de la religión) que le habíamos enseñado, pero la mayoría de la gente no posee este conocimiento[396].
69. Y cuando se presentaron ante José, este se aproximó a su hermano (Benjamín) y le dijo (a modo de secreto): «Yo soy tu hermano. No te aflijas por lo que hicieron (con nosotros)».
70. Y cuando les hubo suministrado las provisiones, depositó la copa (de oro) con la que medía el grano en la alforja de su hermano. Luego se oyó a alguien gritar:«¡Vosotros, los de la caravana, sois unos ladrones!».
71. Estos dijeron mientras se aproximaban: «¿Qué es lo que echáis en falta?».
72. Respondieron: «No encontramos la copa (de oro) del rey. Quien la encuentre obtendrá como recompensa la carga de un camello, lo garantizamos».
73. (Los hermanos de José) dijeron: «Por Al-lah que sabéis que no hemos venido aquí para corromper la tierra, y no somos unos ladrones».
74. Dijeron: «¿Y cuál será vuestro castigo si mentís?».
75. (Los hermanos de José) respondieron: «Podréis quedaros (en calidad de esclavo)como castigo con aquel en cuyas alforjas se encuentre. Así es como retribuimos a los injustos».
76. Y (José) empezó a registrar sus alforjas (sin encontrar nada), y finalmente extrajo la copa de la de su hermano (Benjamín). Así es como planeamos que José pudiera tomar a su hermano. No podía hacerlo según la ley del rey[397], a menos que Al-lah quisiera. Elevamos la posición de quien queremos. Pero hay Uno (Al-lah) que está por encima de todos los dotados de conocimiento.
77. (Sus hermanos) dijeron (mintiendo): «Si ha robado, ya lo hizo un hermano suyo con anterioridad[398]». Y José se contuvo y no reveló lo que pensaba. Dijo para sí: «Vosotros estáis en una situación peor, y Al-lah sabe bien lo que decís».
78. (Sus hermanos) le dijeron: «¡oh, Al Aziz!, su padre es un anciano. Toma a cualquiera de nosotros en su lugar, pues vemos que eres un hombre de bien».
79. José (respondió): «¡Que Al-lah nos proteja de tomar a otro que no sea aquel en cuyo poder encontramos lo que nos pertenecía! De lo contrario, seríamos injustos».
80. Y cuando perdieron la esperanza de convencerlo, se retiraron para discutir en privado (la situación). El mayor de ellos dijo: «¿Habéis olvidado que nuestro padre nos hizo jurar por Al-lah (que regresaríamos con Benjamín) y que antes ya faltamos a la palabra que le dimos con respecto a José? Yo no dejaré esta tierra (de Egipto) hasta que mi padre me dé permiso para ello o Al-lah me juzgue, y Él es el mejor de los jueces.
81. »Regresad a vuestro padre y decidle: “¡Oh, padre!, tu hijo (Benjamín) ha robado (y ha sido tomado como esclavo en compensación) y solo damos fe de lo que sabemos, y no podíamos saber lo que iba a pasar (cuando juramos que volveríamos con él).
82. »Pregunta a las gentes de la ciudad en donde estuvimos y a la caravana con la que regresamos, pues, ciertamente, decimos la verdad”».
83. (El padre) dijo: «¡No, (no es cierto lo que decís)!, algo malo habéis tramado contra él. Seré paciente, puede que Al-lah me los traiga a todos[399] de vuelta. Ciertamente, Él es el Omnisciente,el Sabio ».
84. Y se apartó de ellos y dijo: «¡Qué pena siento por José!». Y perdió la vista debido a la tristeza y al dolor que reprimía.
85. (Ellos dijeron): «Por Al-lah que no dejarás de recordar a José hasta consumirtepor la vejez o perecer».
86. (El padre) contestó: «Solo me quejo de mi angustia y de mi penaante Al-lah, y sé de Él lo que vosotros no sabéis.
87. »¡Hijos míos!, id e indagad acerca de José y de su hermano (Benjamín) y no perdáis la esperanza de que Al-lah se apiade de vosotros. Ciertamente, solo se desesperan de Su misericordia quienes rechazan la verdad».
88. Y cuando se presentaron ante José, dijeron: «¡Oh, Al Aziz!, nosotros y nuestra familia nos hemos visto afectados por el hambre y la adversidad, y apenas hemos traído mercancías para intercambiar.Abastécenos dándonos la medida completa y sé caritativo con nosotros. En verdad, Al-lah recompensa a quienes son caritativos».
89. (José) les dijo (revelándoles su verdadera identidad): «¿Acaso no os acordáis de lo que hicisteis con José y con su hermano[400] cuando erais ignorantes?».
90. (Sus hermanos) dijeron: «¿Eres tú, en verdad, José?». Dijo: «Sí, lo soy, y este es mi hermano. Ciertamente, Al-lah nos ha agraciado (reuniéndonos de nuevo). (Que sepan) quienes tienen temor de Al-lah y son pacientes que Al-lah no deja sin recompensa a quienes hacen el bien».
91. (Estos) dijeron: «¡Por Al-lah que Él te ha preferido sobre nosotros, y nosotros hemos sido pecadores!».
92. (Dijo) José: «No habrá hoy para vosotros reproche alguno. Al-lah os ha perdonado, y Él es el más Misericordioso de todos.
93. »Id con esta camisa mía y ponedla sobre el rostro de mi padre para que vuelva a ver. Después, volved aquí con toda la familia».
94. Y cuando la caravana regresó (de Egipto), su padre dijo: «¡Percibo el olor de José, aunque penséis que he perdido la razón con la edad!».
95. (Quienes estaban presentes junto con el padre) le dijeron: «¡Por Al-lah! ¡Sigues en tu antiguo error (de no querer olvidar a José por el amor que le tenías)!».
96. Y cuando el portador de las buenas noticias llegó, puso la camisa sobre el rostro (de Jacob) y este recobró la vista. Dijo (Jacob): «¿No os dije que sabía de Al-lah lo que vosotros ignorabais?».
97. (Los hermanos de José) le dijeron: «¡Oh, padre!, pide perdón a Al-lah por nuestros pecados; ciertamente, hemos sido unos pecadores».
98. (Este) dijo: «Pediré a mi Señor que os perdone. En verdad, Él es el Indulgente, el Misericordioso».
99. Y cuando (toda la familia) se presentó ante José, este tomó a sus padres cerca de él y les dijo: «Entrad (y estableceos) en Egipto. Si Al-lah quiere, no tendréis aquí nada que temer».
100. E hizo que sus padres tomaran asiento (cerca de él) en un lugar honorable,y (entonces) ellos y sus hermanos se postraron ante él (en señal de respeto, como se hacía entonces con los reyes). Y dijo (José): «¡Padre mío, esta es la interpretación del sueño que tuve hace tiempo! Al-lah ha hecho que se cumpla. Y, ciertamente, me agració cuando me liberó de la prisión y ostrajo del desierto después de que el Demonio sembrara la discordia entre mis hermanos y yo. En verdad, mi Señor es Benévolo con quien quiere, y Él es el Omnisciente, el Sabio».
101. (Después, José invocó a su Señor diciendo:) «¡Señor!, me has concedido poder y me has enseñado la interpretación de los sueños. ¡Creador de los cielos y de la tierra!, Tú eres mi protector en esta vida y en la otra; haz que muera sometido a Ti y reúneme (en la otra vida) con los rectos y virtuosos».
102. Esto es parte de las historias que desconocías (¡oh, Muhammad!) y que te revelamos. Y no estabas con (los hermanos de José) cuando prepararon su plan y lo llevaron a cabo[401].
103. Y la mayoría de la gente no creerá (en la verdad), por mucho que lo desees.
104. Y tú (¡oh, Muhammad!) no les pides ninguna remuneración (por trasmitirles el Corán).Este no es sino una exhortación para los mundos (de los hombres y de los yinn).
105. Y hay muchísimas pruebas (sobre la unicidad de Al-lah) que contemplan en los cielos y en la tierra, mas les dan la espalda (al no reflexionar sobre ellas).
106. Y la mayoría de quienes creen en Al-lah (como el únicoCreador de los cielos y de la tierra) adoran a otros además de a Él.
107. ¿Acaso creen que están a salvo de que los envuelva el castigo de Al-laho de que les llegue la Hora de repente,sin que se den cuenta?
108. Diles (¡oh, Muhammad!): «Este es mi camino. Tanto yo como quienes me siguen exhortamos a la religión de Al-lahcon pruebas firmes. ¡Glorificado sea Al-lah! Y yo no soy de los idólatras».
109. Y antes de ti (¡oh, Muhammad!), no enviamos como mensajeros Nuestros sino a hombres a quienes inspiramos Nuestra revelación (para que la transmitieran) a las gentes de sus propias ciudades. ¿Acaso no viajan por la tierra y ven cuál fue el final de quienes los precedieron (y reflexionan sobre ello)? Y la Última Morada (del paraíso) junto a Al-lah es mejor para los piadosos. ¿Es que no razonaréis?
110. Y cuando los mensajeros perdieron toda esperanza (de que sus respectivos pueblos creyeran) y pensaron que (los creyentes que los seguían) empezaban a dudar sobre la veracidad de sus palabras,llegó Nuestra ayuda ysalvamos a quienes quisimos; y los pecadoresidólatras no pueden evitar que Nuestro castigo se abata sobre ellos.
111. Ciertamente, en estas historias hay una lección para los hombres de buen juicio. (Este Corán) no es un relato inventado, sino que es la confirmación de lo que ya tenían (en los libros sagrados anteriores) y una explicación detallada de todas las cosas; es una guía y misericordia para quienes creen.